El hogar inteligente
Empieza el año 2023, la tecnología nos invade y la mayoría vivimos pegados a un smartphone, ¿pero qué significado tiene para nosotros la palabra smart? ¿Inteligente?
Está claro que nuestros teléfonos son inteligentes, cuentan con un procesador, acceso a internet, conocen nuestros gustos e incluso son capaces de tomar decisiones por ellos mismos, recordarnos dónde hemos aparcado el coche, calcular el tiempo necesario para llegar a nuestro destino, etc. ¿Pero qué pasa con nuestras viviendas? ¿Qué significado tiene la palabra domótica o su versión moderna smart home?
Nadie concibe un coche hoy en día en el que tengas que subir las ventanillas manualmente (y eso que la manivela nos quedaba cerca) y las persianas que tenemos en casa… ¿se suben a mano?. Mucha gente ha empezado a instalar motores que funcionan con un mando o un pulsador en la pared. Es un paso, pero pequeño. Vale que ya no tendríamos manivela, ¿pero ahora tenemos que apretar un botón en la pared?.
Para nosotros domótica es una palabra en desuso, nadie sabe lo que significa y no porque seamos ignorantes, sino por el mal uso que se ha hecho de la misma con el paso del tiempo. Solemos oír frases como:
Mi casa tiene las persianas domotizadas
cuando simplemente son persianas con un motor y un mando a distancia. Nos hemos encontrado casas con sistema de seguridad, climatización, persianas automáticas, etc. con media pared llena de pulsadores: uno para cada circuito de luz, para las persianas, el termostato del clima, el panel de la alarma… en fin, un montón de botones que hacen cosas cuando alguien con inteligencia los aprieta. El concepto domótica va más allá de la automatización, se trata de integrar los diferentes elementos de un hogar para que trabajen de forma eficiente y coordinada.
Cuando conectamos a un mismo sistema de control diferentes partes de nuestra casa es cuando podemos llegar a conseguir un control inteligente, una smart home de verdad. Pero de nuevo el abuso de la palabra smart está consiguiendo crear confusión y que nuestras viviendas sigan siendo un conjunto de elementos estáticos, inanimados y aburridos.
Amazon, Apple, Google... todos ellos venden equipos llamados smart. ¿Realmente lo son? Un enchufe que se conecta solo a una hora del día o cuando se lo dices a Alexa NO es un enchufe inteligente por mucho que lo ponga en la caja. Un asistente virtual no deja de ser eso, un asistente. Eso sí, combinado con un buen sistema domótico es una pasada, pero desde luego no algo imprescindible.
¿Te imaginas dotar a tu vivienda de un cerebro, que tome decisiones por ti y te haga la vida más sencilla? Eso es lo que para nosotros significa la palabra domótica o smart home. No se trata de instalar un pantallón carísimo en una pared para interactuar con los distintos elementos de tu casa, como tampoco es instalar un montón de cacharrines que dejan de funcionar cuando te quedas sin internet. Es que tu casa cobre vida, tome decisiones, te hable, realice tareas cotidianas, reduzca su consumo energético, proteja a sus huéspedes y les genere un estado agradable de bienestar sin necesidad de apretar ni un solo botón y sí, sin necesidad de internet.
En Smart Hamon nos encanta la domótica de verdad, que nuestras persianas se muevan solas en función de la incidencia del sol y manteniendo la temperatura de nuestra casa, sacar el máximo partido a una instalación de placas solares optimizando el consumo y la gestión de excedentes... Seguro que has visto detectores de presencia que encienden una luz cuando pasas, pero ¿y si ese mismo sensor sirviera como alarma cuando no estás, o para mantener el clima a la temperatura deseada en esa estancia? Pues esto son sólo algunas de las muchas cosas que puede hacer por tí una smart home de verdad.
No te pierdas los próximos artículos que iremos colgando en nuestra web donde explicaremos en detalle qué puede hacer una vivienda inteligente por nosotros, ¡para que tengamos más tiempo para lo que realmente importa!